Publicado el :
20/05/2022 12:30:29
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Trucos de limpieza y consejos para quitar manchas difíciles
Sin duda las corbatas son por excelencia prendas que nos ofrecen elegancia, distinción y clase.
Si bien no todos usamos corbatas puede ser que alguna vez sí que sea así por lo que nunca va mal tener una ligera de idea como limpiarlas.
No son pocas las veces que se ensucian por ejemplo al comer.
Por eso a continuación veremos cómo limpiar una corbata y teniendo en cuenta también el material de la que esté fabricada, como seda, algodón, etc…
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Para empezar es preciso anotar como dato importante por posible desconocimiento si no se usa mucho, que las corbatas no deben introducirse para su lavado en las lavadoras.
Esto es así, por el simple hecho de que los tejidos, las costuras y los famosos pliegues, pasando igual en el caso de las secadoras porque sin duda el resultado no nos gustará nada, así pues primero evitar este aspecto.
Tipos de corbata y tipos de manchas. Atención:
Cómo bien anteriormente se comentaba podemos encontrarnos con corbatas fabricadas con diferentes tejidos, ahora hablaremos de cómo limpiar las corbatas de seda.
La seda es brillante y por excelencia el tejido para muchas personas preferido a la hora de adquirir una corbata.
Pero ¿Cómo limpiar una corbata de seda? Pues bien, si hablamos de manchas de tipo superficial que no tengan mucha importancia podemos optar tranquilamente por utilizar algo tan práctico como el vapor de la plancha.
En este caso, en la tabla de planchar colocaremos dicha corbata, pero atención, con la plancha a temperatura máxima. A continuación pasaremos la plancha por encima a unos cuantos dedos de distancia, ojo, sin que nuestra plancha llegue a tocar la tela y aplicaremos el vapor.
De esta forma y debido a una temperatura alta, conseguiremos eliminar las posibles bacterias que se encuentren en la prenda, pero tal y como se comenta esto es recomendable en el caso de manchas de tipo superficial.
Imagen: Lejia Neutrex Futura Ropa 2 L.
Y es que si hay manchas muy habituales en corbatas con las típicas manchas de comida.
Un truco popular es el famoso polvo de talco, el clásico para bebés.
Pero hay que decir que las manchas que cuestan más de eliminar son las de grasa.
Si es así el caso entonces, ya no será una mancha superficial y por tanto deberemos encontrar otro remedio para limpiarla.
En ese caso aplicaremos también talco por encima de la mancha dejándolo actuar durante unas horas.
Además podremos repetir este proceso las veces que se necesiten para conseguir eliminar la mancha.
Pero es importante comentar que la mancha tampoco se eliminará totalmente, sino que se conseguirá atenuar lo máximo posible,
lo cual tampoco está nada mal.
Imagen: Suavizante Ropa 5L.
Pero como existen otro tipo de manchas también podemos tener en cuenta otro tipo de remedios, por ejemplo en:
Manchas que no tengan una base aceitosa, procederemos a usar para ello el famoso y recurrente bicarbonato.
Para ello procederemos a disolver un poco de bicarbonato en un vaso de agua, usando un paño húmedo en dicho líquido presionaremos sobre dicha mancha.
Es vital recordar que hay que presionar sobre la mancha y no frotar, porque lo que podríamos conseguir es el efecto contrario, es decir hacer la mancha más grande.
Limpiar manchas en otros tejidos:
Si bien la mayoría de las corbatas son de seda, también podemos encontrarlas en el mercado actual de otros tejidos diversos y es por ello que usaremos diferentes métodos a la hora de limpiar.
Corbatas de algodón:
Lo vital sobretodo a tener en cuenta es que no debemos proceder a lavarlas con agua caliente esto es así porque como todos sabemos, el algodón encoge y nuestra corbata se podría deformar.
En este caso la mejor opción es sin duda lavarla a mano, pero ojo, con jabón neutro y, en el caso de tener manchas, frotaremos con delicadamente, casi como si le diésemos un masaje a nuestra corbata, para evitar con ello deformar la tela mojada.
En materiales sintéticos:
En este caso tanto el poliéster o la licra usaremos el mismo método que en la ocasión anterior, haciendo especial hincapié especialmente en el secado.
En este caso, eso sí, lo más aconsejable será extenderlas sobre nuestro tendedero pero de forma horizontal, ya que si lo hacemos en una cuerda de forma vertical la corbata podría podría llegar a deformarse, cosa que no queremos, además podría dar incluso de sí, siendo debido al peso de la tela mojada y con ello quedar marcadas tanto la cuerda como la pinza en el tejido, algo bastante complicado de eliminar a la hora de planchar.
Si las corbatas son de lana, es casi obligado también usar para ello agua fría a la hora del lavado.
Sin olvidar que es aconsejable el uso de suavizante al finalizar para poder evitar con ello que el tejido se apelmace y resulte una corbata rígida en exceso y sin caída, lo cual no nos resultará ni estético ni agradable a la hora colocarnos una corbata.
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